"PIDO LA PALABRA POR ALUSIONES"
SIN MIEDO AL OPUS DEI
Escrito por Juan Antonio Camargo*
Diario de Alcalá se incorpora a la cruzada empresarial antiPodemos convocada por el presidente de Freixenet. En efecto en el contenido del editorial de hoy, Miércoles, 03 Diciembre 2014 08:22 firmado por la Redacción de Diario de Alcalá, ya se percibe un sutil tufillo a podrido que procede de esa auténtica escuela de corrupción que dirige el periodista facha Antonio R. Naranjo despedido-por matón y violento-de de Onda Cero, junto a Máximo Pradera, por su amiga Julia Otero.
En mi opinión un gobierno presidido por Pablo Iglesias, como ha ocurrido en Uruguay con el carismático y ya expresidente José Mújica ó con los gobiernos de Lula da Silva y de donha Dilma Roussef en la República Federativa de Brasil, tendria un efecto bebeficioso para la aceleracion de la velocidad de salida de la crisis del Reino de España, presuntamente claro.
<<Habrá amplaición>>
Diario de Alcalá
La batalla de los candidatos a la alcaldía
Redacción - Miércoles, 03 Diciembre 2014 08:22
Si a los distintos partidos les sobraron carteles electorales de
2011, pueden utilizarlos en 2015 cambiando sólo una cifra. Casi todos
los que fueron candidatos entonces lo serán la próxima primavera,
Javier Rodríguez encabezará al PSOE por tercera vez consecutiva, al igual que Pilar Fernández en IU. El portavoz magenta, Anselmo Avendaño, liderará su lista por segunda vez, salvo que su imputación en los juzgados o las polémicas que ha protagonizado le aparte de la candidatura en aplicación de los estatutos de UPyD y de su propia moción en el pleno de noviembre, cuando pidió que ningún político en su situación formara parte de listas electorales. Pero esa posibilidad se antoja remota, por mucho que ello pueda dañar a las expectativas electorales de su partido.
Hasta Ciudadanos, que debuta en Elecciones Municipales, tiene referente en un ex militante popular, Miguel Ángel Lezcano que, como Albert Rivera en su día, abandonó el partido de la gaviota para instalarse en las siglas que disputan al partido de Rosa Díez la asimilación de descontentos que tampoco confían en Podemos.
En principio, Javier Bello se ve candidato con seguridad, desde su doble condición de alcalde vigente y de presidente local del PP. Sería lo normal, pero también hay factores que pueden variar el presagio. El más importante, la resaca de la 'Operación Púnica' en Alcalá, que si bien no tiene al menos ahora efectos judiciales, sí los tiene políticos: la ristra de contratos entre el Ayuntamiento y las dos empresas más implicadas en la trama, pone en serios aprietos al presidente del Ayuntamiento, especialmente en un periodo preelectoral en el que todos sus rivales disparan a matar con razón o sin ella.
Un último apunte se contrapone a la solidez aparente de Bello al frente del PP: no ha logrado trabar grandes relaciones políticas ni en Génova ni en la Puerta del Sol, aunque sí con uno de los nombres que más suenan para todo en Madrid, el de Cristina Cifuentes, actual Delegada del Gobierno en la región, y distinguida por el alcalde como popular del año.
En su círculo más cercano, Bello se siente candidato y así lo manifiesta, no sin lógica, pero todo puede cambiar en el PP madrileño, en general, cuando se despeje quiénes lo lideran para competir por la presidencia regional y por la alcaldía de la capital. Si Ignacio González consigue la designación, como parece probable, todo puede estar abierto en decenas de candidaturas municipales que el PP tiene en el alero, en las que puede imponerse un borrón y cuenta nueva con candidatos procedecentes incluso de la Asamblea de Madrid, algo que en 2011 funcionó en Getafe y Alcorcón con Juan Soler y David Pérez.
Las certezas de Bello son mayores que las incógnitas, pero la mera existencia de éstas ya tienen un alto valor político. Especialmente si se confirma la tendencia a la baja del PP en Alcalá, que hasta ahora sólo ha registrado una encuesta nacional elaborada por elconfidencial.com recientemente.
Según este sondeo, el PP complutense tendría imposible conservar la alcaldía ni en solitario ni con pactos con terceros: el único que podría ayudarle potencialmente, UPyD, se ha tomado en Alcalá como algo personal la defenestración de Bello más que la del PP. Tras dar a los populares la alcadía por dos veces, aunque su discurso oficial, sorprendentemente, responsabiliza siempre a terceros de algo que firmó Avendaño en persona.
En todos los grandes municipios los populares caen significativamente, pero en ninguno como en la ciudad complutense y Leganés: en la horquilla de 8/10 concejales la primera; en la de 7/9 la segunda, en ambos insuficiente para renovar la presidencia del Consistorio, que quedaría en manos probablemente del partido más votado de la izquierda. Bien el PSOE, bien el que encabece una eventual plataforma electoral que sume a IU, Podemos y colectivos sociales. En ese caso, si Pilar Fernández es la elegida de esa 'ola', su alcaldía es factible.
La misma encuesta refleja la situación excepcional de Alcalá, donde no es posible lo que sí le alcanza aritméticamente al PP para conservar la Puerta del Sol y Cibeles con alianzas complejas pero factibles con la aritmética: en ninguna de las dos plazas retiene la mayoría absoluta, pero su caída es menor y le permite conseguirla con un acuerdo con UPyD y/o Ciudadanos (que no aparece en el sondeo pero se presentará en la Comunidad) que de no sellarse harían a los magenta cómplices de un bipartito o tripartito de IU, PSOE y Ganemos, Podemos o cualquiera de las siglas que representen a esos votantes.
La batalla, en fin, ha comenzado. Si es que alguna vez paró.
Javier Rodríguez encabezará al PSOE por tercera vez consecutiva, al igual que Pilar Fernández en IU. El portavoz magenta, Anselmo Avendaño, liderará su lista por segunda vez, salvo que su imputación en los juzgados o las polémicas que ha protagonizado le aparte de la candidatura en aplicación de los estatutos de UPyD y de su propia moción en el pleno de noviembre, cuando pidió que ningún político en su situación formara parte de listas electorales. Pero esa posibilidad se antoja remota, por mucho que ello pueda dañar a las expectativas electorales de su partido.
Hasta Ciudadanos, que debuta en Elecciones Municipales, tiene referente en un ex militante popular, Miguel Ángel Lezcano que, como Albert Rivera en su día, abandonó el partido de la gaviota para instalarse en las siglas que disputan al partido de Rosa Díez la asimilación de descontentos que tampoco confían en Podemos.
De izquierda a derecha y de
arriba a abajo: Javier Bello, Javier Rodríguez, Pilar Fernández, Anselmo
Avendaño, Rafael Ripoll y Miguel Ángel Lezcano
Sólo el PP carece de referente formal, y no lo tendrá al menos hasta
el mes de marzo si se cumplen las previsiones. O incluso más tarde, pues
sólo una vez confirmados los candidatos a las presidencias autonómicas y
las grandes capitales, se procederá con los municipios por tandas: si
Alcalá no fuera de los primeros en despejar esa incógnita, su candidato
podría no estar confirmado incluso hasta el mes de abril, apenas dos meses antes de los comicios.En principio, Javier Bello se ve candidato con seguridad, desde su doble condición de alcalde vigente y de presidente local del PP. Sería lo normal, pero también hay factores que pueden variar el presagio. El más importante, la resaca de la 'Operación Púnica' en Alcalá, que si bien no tiene al menos ahora efectos judiciales, sí los tiene políticos: la ristra de contratos entre el Ayuntamiento y las dos empresas más implicadas en la trama, pone en serios aprietos al presidente del Ayuntamiento, especialmente en un periodo preelectoral en el que todos sus rivales disparan a matar con razón o sin ella.
Madrid pesará mucho en la designación de Alcalá, aunque oficialmente todo es aparente normalidad
Otro factor importante es la crisis interna del PP local y del propio grupo de concejales, dividido, cuando no enfrentado,
aunque en público guarda las apariencias. Un sector importante de la
militancia no esconde su desafecto a Bello, con más ruido que fuerzas
hasta el momento, pero con la sensación de que si el cisma entre Bello y
su mentor, Bartolomé González, aumenta en intensidad,
puede pasar de todo. E incluso se citan nombres ya para discutir un
liderazgo que, a efectos formales, sin embargo es estable: desde el
concejal Marcelo Isoldi hasta el abogado Luis Vargas, viejo militante y antiguo edil que siempre reaparece en fechas electorales.Un último apunte se contrapone a la solidez aparente de Bello al frente del PP: no ha logrado trabar grandes relaciones políticas ni en Génova ni en la Puerta del Sol, aunque sí con uno de los nombres que más suenan para todo en Madrid, el de Cristina Cifuentes, actual Delegada del Gobierno en la región, y distinguida por el alcalde como popular del año.
En su círculo más cercano, Bello se siente candidato y así lo manifiesta, no sin lógica, pero todo puede cambiar en el PP madrileño, en general, cuando se despeje quiénes lo lideran para competir por la presidencia regional y por la alcaldía de la capital. Si Ignacio González consigue la designación, como parece probable, todo puede estar abierto en decenas de candidaturas municipales que el PP tiene en el alero, en las que puede imponerse un borrón y cuenta nueva con candidatos procedecentes incluso de la Asamblea de Madrid, algo que en 2011 funcionó en Getafe y Alcorcón con Juan Soler y David Pérez.
Las certezas de Bello son mayores que las incógnitas, pero la mera existencia de éstas ya tienen un alto valor político. Especialmente si se confirma la tendencia a la baja del PP en Alcalá, que hasta ahora sólo ha registrado una encuesta nacional elaborada por elconfidencial.com recientemente.
Según este sondeo, el PP complutense tendría imposible conservar la alcaldía ni en solitario ni con pactos con terceros: el único que podría ayudarle potencialmente, UPyD, se ha tomado en Alcalá como algo personal la defenestración de Bello más que la del PP. Tras dar a los populares la alcadía por dos veces, aunque su discurso oficial, sorprendentemente, responsabiliza siempre a terceros de algo que firmó Avendaño en persona.
En todos los grandes municipios los populares caen significativamente, pero en ninguno como en la ciudad complutense y Leganés: en la horquilla de 8/10 concejales la primera; en la de 7/9 la segunda, en ambos insuficiente para renovar la presidencia del Consistorio, que quedaría en manos probablemente del partido más votado de la izquierda. Bien el PSOE, bien el que encabece una eventual plataforma electoral que sume a IU, Podemos y colectivos sociales. En ese caso, si Pilar Fernández es la elegida de esa 'ola', su alcaldía es factible.
La misma encuesta refleja la situación excepcional de Alcalá, donde no es posible lo que sí le alcanza aritméticamente al PP para conservar la Puerta del Sol y Cibeles con alianzas complejas pero factibles con la aritmética: en ninguna de las dos plazas retiene la mayoría absoluta, pero su caída es menor y le permite conseguirla con un acuerdo con UPyD y/o Ciudadanos (que no aparece en el sondeo pero se presentará en la Comunidad) que de no sellarse harían a los magenta cómplices de un bipartito o tripartito de IU, PSOE y Ganemos, Podemos o cualquiera de las siglas que representen a esos votantes.
La batalla, en fin, ha comenzado. Si es que alguna vez paró.
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