11/3/2018
Lluis Bassets
|
La derrota, que es amarga e intratable, constituye una caja de sorpresas. Por más que uno quiera prepararse para encajarla, todo lo que trae consigo nos pilla desprevenidos. Me refiero, claro está, a una derrota entera, sin remedio, sin transacciones.
No hay comentarios:
Publicar un comentario