Italia, Berlusconi y la "Conjura de los Cardenales" para matar al Papa Francisco.

Los Verdes de Alcalá de Henares

Berlusconi es traicionado por su 'número dos', que pide el voto para Enrico Letta.



'Il Cavaliere' quería hacer caer al Gobierno ordenando la dimisión de varios ministros de su partido

El secretario y número dos del partido Pueblo de la Libertad (PDL), fundado por Silvio Berlusconi, ha llamado a todos sus parlamentarios a respaldar al gobierno del socialdemócrata Enrico Letta, desmarcándose de la orden del magnate de hacer caer el gobierno en el parlamento tras su inhabilitación. "Estoy convencido firmemente de que todo el partido debe votar el miércoles la confianza al gobierno presidido por Letta", ha declarado Alfano, vice primer ministro y ministro del Interior del gobierno de coalición de centro-derecha.

"Somos muchos, más de 40 y estamos decididos a no dejar caer el gobierno. Por lo tanto daremos la confianza a Letta", declaró por su parte el senador Carlo Giovanardi, dirigente del PDL. "Tengo la impresión de que todo el PDL está madurando esa idea", agregó el senador a la cadena de noticias SKY Tg24.

El primer ministro italiano decidió someterse el miércoles a un voto de confianza en el parlamento para poder seguir gobernando, después de que el líder de la derecha, Berlusconi, desatara una crisis con la dimisión el sábado de los cinco ministros de su partido.

La jugada política de Berlusconi, de 77 años, -desesperado ante la posibilidad de perder su inmunidad parlamentaria y para evitar la humillación de una votación en el Senado que podría conducir a su inhabilitación política y su arresto domiciliario-, irritó no sólo a los aliados de centroizquierda, sino también a una parte de su propio partido y a sus ministros, que se enteraron por teléfono de que debían dimitir. Letta presentará en el Parlamento un programa económico y social hasta 2015 para dar estabilidad a Italia, tercera economía de la zona euro y sumida en una fuerte crisis económica.

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Comentario Político

Las circunstancias políticas no le dejan otra opción a Berlusconi que activar su Plan B, es decir promover el asesinato del Papa Francisco, presuntamente claro.

 

Uno no puede evitar ver a nuestro cardenal Rouco Varela implicado en esa presunta Conjura de Cardenales una reedición del Papado de la familia valenciana de Los Borgia, presuntamente claro.

 

En mi opinión la decisión de matar al Papa Francisco ya esta tomada y el único problema de los cardenales presuntamente conjurados, es que hacer con Benedicto XVI, presuntamente claro.