Artículo publicado originalmente en soyresponsable.es. El precio medio de una incubadora ronda los 6.000 dólares, una cantidad muy elevada que difícilmente se pueden permitir en muchos hospitales de las regiones más desfavorecidas del planeta. Para poner remedio a este problema, el ingeniero madrileño Alejandro Escario Méndez ha diseñado una incubadora de bajo coste (menos de 300 dólares por unidad), y sencilla de instalar y emplear. Tanto es así, que su prototipo ya se está utilizando en una maternidad del país africano de Benin desde el pasado mes de septiembre gracias a la colaboración de la Fundación Alaine.
Escario, de tan solo 25 años de edad, desarrolló el pasado curso su proyecto dentro del fablab madrid ceu de la Universidad San Pablo CEU. Se trata del único laboratorio en Madrid incluido en la red mundial de laboratorios del Center for Bits and Atoms del mit (Massachusetts Institute of Technology). El LabLab Pertenece además al FabAcademy, programa de formación en Fabricación Digital de alto nivel del MIT.
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