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3/4/2018
Silvia Ayuso
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El sector ferroviario endurece su pulso contra las reformas de Macron.
Air France también hará huelga. Los trabajadores de la SNCF, la compañía nacional de ferrocarriles de Francia, redoblan su pulso contra el presidente, Emmanuel Macron, y sus planes de emprender una profunda reforma de un sector que en el pasado ya doblegó a otros gobiernos que osaron proponer cambios a un pilar sagrado del sistema público francés. Desde la noche del lunes, pero sobre todo este martes y el miércoles, los empleados de la red de ferrocarriles llevan a cabo la primera de una larga serie de huelgas intermitentes —que se prolongarán hasta junio— que amenaza con paralizar buena parte del país. Un nuevo paro anunciado por su parte por la aerolínea Air France promete complicar más aún la situación.
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