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| 03/05/2023 |
Denuncian que entrenar a ChatGPT con estilos propios infringe los derechos de autor.
Temen que los estudios les paguen menos por revisar guiones hechos por la IA.
La huelga de escritores y guionistas de Hollywood del pasado lunes ha puesto el foco, además de en la mejora de las condiciones que reclama el sector, en uno de las situaciones más complejas que derivan de la vertiginosa evolución de la Inteligencia Artificial: el intrusismo profesional de los robots. Como si de una pesadilla se tratara, los mundos que muchos de estos profesionales crearon para la ciencia ficción, con máquinas doblegando al ser humano, se están empezando a ver representados, en su capa más superficial, en el día a día de ellos.
Que la creatividad no se puede programar es una de las premisas que alejan el riesgo de las profesiones 'de letras' de ser suplantadas por la IA. Sin embargo, herramientas como ChatGPT están poniendo a prueba ese argumento. Seguir leyendo>>
Temen que los estudios les paguen menos por revisar guiones hechos por la IA.
La huelga de escritores y guionistas de Hollywood del pasado lunes ha puesto el foco, además de en la mejora de las condiciones que reclama el sector, en uno de las situaciones más complejas que derivan de la vertiginosa evolución de la Inteligencia Artificial: el intrusismo profesional de los robots. Como si de una pesadilla se tratara, los mundos que muchos de estos profesionales crearon para la ciencia ficción, con máquinas doblegando al ser humano, se están empezando a ver representados, en su capa más superficial, en el día a día de ellos.
Que la creatividad no se puede programar es una de las premisas que alejan el riesgo de las profesiones 'de letras' de ser suplantadas por la IA. Sin embargo, herramientas como ChatGPT están poniendo a prueba ese argumento. Seguir leyendo>>
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