Las favelas del Complejo de Manguinhos, una de las
zonas más pobres de Río de Janeiro, aguardan con impaciencia, ilusión e
incredulidad la visita del papa Francisco, que recorrerá sus callejas
durante la Jornada Mundial de la Juventud (JMJ) del próximo julio. El
Papa decidió incluir en su agenda en Brasil una visita a una favela y,
según reveló el gobernador de Río de Janeiro, Sergio Cabral, la elegida
fue Manguinhos.
Se trata de un complejo que aglutina
13 barriadas, con una población de 50.000 personas y que, hasta hace muy
poco, era una de las zonas más peligrosas de la ciudad. La Policía tomó
el control de Manguinhos en octubre y expulsó a la banda de
narcotraficantes Comando Vermelho, cuyas siglas, C.V., todavía relucen
en incontables fachadas de ladrillo como recuerdo del yugo de represión
violenta y los tiroteos por los que esta favela fue llamada durante
décadas “Franja de Gaza”.
María da Penha, que ha
vivido sus 42 años en esa favela, reveló que la llegada de la Policía no
ha supuesto el fin de la venta de drogas, ni de la violencia dentro de
la favela, a la vez que como muchos otros vecinos alabó el gesto de
Francisco por visitar a los pobres.
Además de la
visita a la favela, Francisco tiene prevista una intensa agenda con
motivo de la JMJ, que tendrá lugar entre el 25 y 28 de julio, incluido
un vía crucis en la playa de Copacabana.
No hay comentarios:
Publicar un comentario