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| La Vanguardia 26/09/2021 C. Castro |
El consenso al respecto es tan extenso que alcanza a casi el 80% de los votantes de Esquerra y al 60% de los de Junts. Solo entre los electores de la CUP son más numerosos los partidarios de la unilateralidad (59% frente al 33%), mientras que el resto del electorado presta un apoyo abrumador a la consecución de un acuerdo negociado (por encima del 90% entre los votantes socialistas, populares y de los comunes).
El problema, de nuevo, se plantea al descender a los detalles. La mesa de diálogo, por ejemplo, sigue suscitando un notable escepticismo como instrumento idóneo “para explorar salidas al conflicto catalán”. De hecho, una leve mayoría del 48,5% frente al 46% considera que esa mesa no servirá para resolver la crisis territorial, mientras que en enero pasado la correlación era la inversa. Y lo llamativo de ese escepticismo es que alcanza a los votantes de todos los partidos, al margen de su posición ante el proceso soberanista. Por ejemplo, el 43% de los electores de ERC, el 40% de los del PSC y el 60% de los de Junts o el PP desconfían de los resultados de la mesa de diálogo. Solo entre los votantes de los comunes se registra un porcentaje robusto (superior al 70%) de ciudadanos que juzgan positivamente ese mecanismo.
El apoyo a la secesión cae por debajo del 40% y un 48% apuesta por negociar mejoras en la financiación y el autogobierno
Además, un 56% atribuye a todos los actores implicados (el Gobierno central, Esquerra y Junts) la responsabilidad en las dificultades que está teniendo la mesa de diálogo, y otro 20% culpa al Ejecutivo español. Solo un 14% achaca a Junts alguna responsabilidad en los escollos con que tropieza esa instancia negociadora.
A partir de ahí, las vías preferidas en una negociación bilateral para resolver el conflicto catalán reflejan una dispersión que parece poner aún más difícil el logro de un pacto. Mientras en mayo la mejora del sistema de financiación se destacaba como la vía preferida (con un 36% de apoyos), ahora las opciones posibles cosechan un respaldo similar: un 27% apuesta por cambiar el modelo de financiación, otro 25% por una reforma constitucional y un 29% por un referéndum de autodeterminación.
Sin embargo, si se pregunta a los ciudadanos cuál debería ser la estrategia del Gobierno catalán, la opción preferida no ofrece dudas: un 48% defiende negociar mejoras en el autogobierno y la financiación, y otro 16% se inclina por gestionar las competencias del actual Estatut. Solo un 15% propone negociar la celebración de una consulta y la amnistía de los presos, y una tasa menor, el 8%, aconseja “aprobar una nueva DUI y proclamar la república catalana”. Esta última opción solo cuenta con el respaldo de uno de cada diez votantes de Esquerra y de uno de cada cuatro de Junts.
El 56% culpa por igual a todos los actores implicados de los tropiezos que registra la mesa de diálogo
En este sentido, el apoyo global a la independencia vuelve a descender con respecto a la primavera pasada. Ahora ya se sitúa por debajo del 40%, mientras que el rechazo se acerca al 53%. Y en este contexto, el indulto a los presos independentistas es juzgado positivamente por casi el 60% de la sociedad catalana.
Ficha técnica
Universo: residentes en Catalunya con derecho a voto.
Ámbito: autonómico.
Cuotas: sexo, edad y geográficas según el censo electoral (INE).
Procedimiento de recogida de la información: entrevista telefónica asistida por ordenador (CATI).
Tamaño de la muestra: 806 entrevistas en total. 384 entrevistas a teléfonos fijos y 422 a teléfonos móviles.
Error muestral: ± 3,5% (n=806) para un grado de confianza del 95,5 (dos sigmas) y en la hipótesis más desfavorable de P=Q=0,5 en el supuesto de muestreo aleatorio simple.
Duración de la entrevista: 5-7 minutos aproximadamente.
Fechas del trabajo de campo: del 20 al 22 de septiembre de 2021.
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