domingo, 26 de septiembre de 2021

Israel: la constante de Alemania en política exterior.

25.09.2021
Tania Krämer
El Holocausto define la relación entre Alemania e Israel hasta el día de hoy. Angela Merkel fortaleció ese vínculo, pero también apoyó a los palestinos. ¿Qué nos depara el nuevo gobierno federal?
La canciller Angela Merkel tuvo que cancelar su último viaje a Israel con poca antelación debido a los hechos desatados en Afganistán a finales de agosto. En junio, el nuevo primer ministro de Israel, Naftali Bennett, invitó a Merkel poco después de formar un nuevo gobierno de coalición que puso fin al largo mandato de Benjamin Netanyahu.

Uno de los temas urgentes de la agenda habría sido Irán y su programa nuclear, lo que también será tema de preocupación para el nuevo gobierno alemán. Las conversaciones sobre una nueva versión del acuerdo nuclear, el Plan de Acción Integral Conjunto (PAIC), están actualmente estancadas. Pocos días antes de la reunión planeada entre Bennett y Merkel, el primer ministro israelí visitó por primera vez al presidente estadounidense, Joe Biden, en la Casa Blanca.

Bennett defendió un enfoque más abierto para coordinar el tema con Estados Unidos y otros aliados, en contraste con su predecesor Netanyahu, quien era considerado un aliado leal del expresidente estadounidense Donald Trump. Durante la administración del republicano, Estados Unidos abandonó el PAIC en mayo de 2018.

El conflicto palestino-israelí no es siempre la prioridad

Los observadores creen que Bennett, un hombre de línea dura que se opone al establecimiento de un Estado palestino, no hará ningún gesto político significativo hacia los palestinos en este momento. La coalición gobernante israelí de partidos de derecha, izquierda y centro, así como un partido árabe, difícilmente podrían encontrar un compromiso sobre el establecimiento de un Estado palestino.

En los últimos años, el conflicto palestino-israelí no siempre ha estado de primero en la agenda en las relaciones bilaterales y solo lo fue más recientemente durante el conflicto militar entre el grupo islamista Hamás e Israel en la Franja de Gaza.

En Ramala, sin embargo, el primer ministro palestino Mohammad Shtayeh describe las relaciones germano-palestinas como "sólidas" y ve a Merkel como un "notable modelo a seguir". La canciller "ha pedido repetidamente a Israel que deje de construir asentamientos en territorio palestino", dice Shtayeh.

Por otro lado, el dirigente espera que Alemania pueda involucrarse aún más, ya que es uno de los mayores países donantes de los palestinos y un Estado miembro influyente de la UE. "Creo que cuando se trata del conflicto palestino-israelí, sería muy importante para Europa darle más peso económico a su acción política", indicó Shtayeh en entrevista con DW.

Pero los años de Merkel también son vistos críticamente por algunos palestinos e israelíes, especialmente desde la izquierda. Alemania podría expresarse con más firmeza sobre las violaciones a los derechos humanos en los territorios ocupados. Y a pesar de las continuas críticas de Alemania sobre la construcción de asentamientos israelíes en la ocupada Cisjordania, se descartan nuevas medidas.

Relaciones germano-israelíes profundizadas con Merkel

Merkel ha visitado Israel seis veces durante su mandato y 12 de los 16 años que ha estado en el poder tuvo que lidiar con Netanyahu como primer ministro, quien ahora se ha convertido en líder de la oposición. En sus primeros años en el cargo, Ehud Olmert, primer ministro de Israel entre 2006 y 2009, fue su contraparte política. En una entrevista con DW en Tel Aviv, Olmert recuerda las relaciones germano-israelíes durante este período: "Hay muchas dimensiones históricas de estas relaciones que obviamente definen el compromiso mutuo de los dos países. En Alemania hay una sensibilidad particular hacia Israel. Y creo que Angela Merkel representa esta sensibilidad moral más que cualquier otro líder", manifestó Olmert.

"Para mí fue un gran placer trabajar con ella. Estuvimos de acuerdo en la mayoría de las cuestiones, e incluso si no era el caso en temas individuales, creamos un marco para discutir esto sin hacer mucho ruido público al respecto", recordó.

Las relaciones germano-israelíes están definidas por el Holocausto, en el que seis millones de judíos fueron asesinados sistemáticamente durante el régimen nazi. Desde el establecimiento de las relaciones diplomáticas en mayo de 1965, los vínculos han crecido de manera constante y se han estrechado. Con Olmert y Merkel, los lazos se profundizaron e institucionalizaron aún más en 2008 a través de consultas gubernamentales anuales en las que los gabinetes israelí y alemán se reúnen en Jerusalén o Berlín.

Discurso importante en el Parlamento israelí

En el mismo año, Israel también celebró el 60 aniversario de su fundación y Merkel fue la primera canciller alemana en ser invitada a dirigirse al Knéset, el Parlamento israelí. Merkel declaró que era una responsabilidad histórica de cada gobierno alemán, la "razón de estado", asumir la responsabilidad de la seguridad de Israel.

"Creo que nadie más podría haberlo dicho mejor que Angela Merkel", dice Olmert, que estaba en el Knéset en ese momento.

Aunque ese discurso todavía se cita a menudo en Alemania hoy en día y se considera que ha dado forma a las relaciones entre Alemania e Israel, algunos historiadores evalúan la influencia en Israel con un poco más de cautela. "Con referencia al Holocausto, la sociedad israelí ha pasado por muchas fases y para muchos era natural que un político alemán dijera algo así", explica Ofer Ashkenazi, director del Centro Richard Koebner Minerva para la Historia Alemana, de la Universidad Hebrea, en Jerusalén.

La imagen de Merkel en Israel

Los tres candidatos que ahora quieren suceder a Merkel son poco conocidos en Israel. También carecen de la reputación internacional que Merkel se ha forjado a lo largo de los años.

"El 80 por ciento del 'centro' político tenía razones para que les agradara" la canciller, explica Ashkenazi. Pero la opinión sobre la canciller alemana ha cambiado a lo largo de los años. Por ejemplo, hubo críticas a la política de refugiados de Merkel en 2015, especialmente en el lado de la derecha. Otros, como los israelíes sionistas de izquierda, ven en ella "un modelo de personalidad política a seguir que puede ser decisivo pero también compasivo, que representa valores", sostiene Ashkenazi. No obstante, se trata "más de sus declaraciones, no tanto de sus políticas, que muchos aquí no necesariamente han seguido (en detalle)".

Asimismo, Olmert estima que Israel ha tenido buenas relaciones con todos los cancilleres y presidentes alemanes anteriores. "Con Merkel había esta dimensión adicional. A la gente le caía bien y sentía empatía con ella", dice Olmert. "Había algo en su actitud, la forma en que se dirigió a Israel y cómo abordó los problemas con los que lidia. Y su personalidad, integridad, compasión, determinación y estilo de liderazgo son de gran importancia". (rr/dzc)

No hay comentarios:

Publicar un comentario