12/07/2021 E. E. |
El número de sursudaneses en peligro de inanición se ha incrementado en un 50% en comparación a 2011, cuando el país se independizó.
Sudán del Sur, el país más joven del mundo, se enfrenta a día de hoy a "la peor crisis de hambre de su historia" al conmemorar el décimo aniversario de su independencia, con 7,2 millones de personas, incluidos millones de niños, al borde de la hambruna, según la ONG Save the Children.
Según un comunicado de la organización, el número de sursudaneses en peligro de inanición se ha incrementado en un 50% en comparación a 2011, cuando el país se independizó de Sudán.
Ya en 2012, según Save the Children, el 40% de la población experimentaba altos niveles de inseguridad alimentaria.
"Esta situación probablemente se deteriorará en los próximos meses debido a la violencia en curso, los altos precios de los alimentos, los impactos climáticos y las barreras al acceso humanitario, a menos que se tomen medidas urgentes a nivel nacional y mundial", según la ONG.
Asimismo, recordó que las últimas estimaciones indican que 1,4 millones de niños y niñas padecen desnutrición aguda, la tasa más elevada desde 2013.
"La desnutrición puede causar retraso en el crecimiento, obstaculizar el desarrollo mental y físico, aumentar el riesgo de desarrollar otras enfermedades, y finalmente causar la muerte", lamentó la ONG.
Inseguridad alimentaria
Al menos 2,47 millones de personas en todo Sudán del Sur se encuentran en niveles de emergencia de inseguridad alimentaria, mientras que 31.000 sursudaneses se enfrentan a "niveles catastróficos" o en condiciones similares a la hambruna.
Por su parte, la directora de Save the Children para Sudán del Sur, Rama Hansraj, dijo en la nota que "las cosas han empeorado de muchas maneras para los niños desde que se formó el país en 2011".
Aludió a la guerra civil que golpeó el país entre 2013 y 2018 y a las crisis climáticas, "que han contribuido a alejar a Sudán del Sur de donde debería estar diez años después".
“El nacimiento de una nueva nación es a menudo un momento de esperanza y alegría para muchas de las personas que viven en ella, pero lamentablemente esta promesa aún no se ha cumplido para Sudán del Sur", lamentó la responsable de la ONG.
Agregó que "Sudán del Sur no es solo una historia de conflicto", sino la de generaciones de desplazamiento de civiles, destrucción, ocupación de sus tierras, situaciones que han sido agravadas por inundaciones devastadoras y diversas plagas, además de la pandemia de la covid-19.
"Solo abordando las causas fundamentales de esta crisis, así como mitigando los efectos devastadores de la pandemia, podremos evitar que una generación sucumba a las consecuencias inmediatas y a largo plazo de la desnutrición", advirtió Hansraj.
Según un comunicado de la organización, el número de sursudaneses en peligro de inanición se ha incrementado en un 50% en comparación a 2011, cuando el país se independizó de Sudán.
Ya en 2012, según Save the Children, el 40% de la población experimentaba altos niveles de inseguridad alimentaria.
"Esta situación probablemente se deteriorará en los próximos meses debido a la violencia en curso, los altos precios de los alimentos, los impactos climáticos y las barreras al acceso humanitario, a menos que se tomen medidas urgentes a nivel nacional y mundial", según la ONG.
Asimismo, recordó que las últimas estimaciones indican que 1,4 millones de niños y niñas padecen desnutrición aguda, la tasa más elevada desde 2013.
"La desnutrición puede causar retraso en el crecimiento, obstaculizar el desarrollo mental y físico, aumentar el riesgo de desarrollar otras enfermedades, y finalmente causar la muerte", lamentó la ONG.
Inseguridad alimentaria
Al menos 2,47 millones de personas en todo Sudán del Sur se encuentran en niveles de emergencia de inseguridad alimentaria, mientras que 31.000 sursudaneses se enfrentan a "niveles catastróficos" o en condiciones similares a la hambruna.
Por su parte, la directora de Save the Children para Sudán del Sur, Rama Hansraj, dijo en la nota que "las cosas han empeorado de muchas maneras para los niños desde que se formó el país en 2011".
Aludió a la guerra civil que golpeó el país entre 2013 y 2018 y a las crisis climáticas, "que han contribuido a alejar a Sudán del Sur de donde debería estar diez años después".
“El nacimiento de una nueva nación es a menudo un momento de esperanza y alegría para muchas de las personas que viven en ella, pero lamentablemente esta promesa aún no se ha cumplido para Sudán del Sur", lamentó la responsable de la ONG.
Agregó que "Sudán del Sur no es solo una historia de conflicto", sino la de generaciones de desplazamiento de civiles, destrucción, ocupación de sus tierras, situaciones que han sido agravadas por inundaciones devastadoras y diversas plagas, además de la pandemia de la covid-19.
"Solo abordando las causas fundamentales de esta crisis, así como mitigando los efectos devastadores de la pandemia, podremos evitar que una generación sucumba a las consecuencias inmediatas y a largo plazo de la desnutrición", advirtió Hansraj.
No hay comentarios:
Publicar un comentario